
“Crossing the bridge: The sounds of Istambul” de Fatih Akin: Estambul es la cuna cultural de Occidente. Contar su historia es contar la historia del mundo moderno. De esta forma, lo que hace Fatih Akin cuando visita a los principales músicos de Turquía no es un simple documental musical: es un viaje a la semilla musical de la civilización. Nada menos. Lo bueno es que el documental no pretende ser nada de eso, y su recorrido es más simple. Lo único que pretende Selim Sesler (músico de “Contra la pared” y alter ego del director para esta historia) es tocar música y conversar con músicos de todas las edades y formaciones, donde sea posible: al interior de un milenario baño turco, arriba de un edificio, en un bar campestre, en una tienda de tatuajes y arriba de un bote en el Bósforo (el título hace referencia al puente Fatih Sultan Mehmet que cruza el estrecho, y que une Europa con Asia). Las voces y los instrumentos colman la película de una belleza y una reflexión sobre las líneas que cruzan la música con los problemas politicos que antes no había visto. Esa frescura del tratamiento, más la trascendencia de lo que se ve y se dice en pantalla son de un contraste único y sorpresivo. Una gran gran película
Sinopsis: Mientras componía la banda sonora de Contra la pared en Estambul, Alexander Hacke, miembro de la vanguardista banda alemana "Einstürzende Neubauten" durante más de 20 años, descubrió la ciudad y su música. Entró en contacto con los miembros del grupo neopsicodélico Baba Zula que le pidieron que sustituyera a su bajista. No fue difícil convencer a este hombre que se dedica a experimentar con el sonido. Pero no llegó sólo con el bajo, también trajo un estudio móvil de grabación y su "micro mágico" con el que ha capturado sonidos exóticos en todo el mundo. Ha bautizado a este peculiar método, que le permite realizar grabaciones profesionales en casi cualquier sitio, como “grabación callejera”. Se propuso capturar la diversidad musical de Estambul para que se oyera en Occidente, desde los sonidos electrónicos más modernos, pasando por el rock y el hip-hop, hasta la música árabe más clásica. Fatih Akin, el director de Contra la pared, le acompañó en su recorrido con su cámara y filmó la escena musical de una ciudad cuyos habitantes aman la música. La base de Alexander Hacke fue el venerable Büyük Londra Oteli ("Gran Hotel de Londres") en el barrio de Beyoglu, quizá el punto más europeo de Turquía. A partir de ahí, recorrió un mundo extraño, contradictorio, lleno de vida y seductor, recogiendo impresiones y grabaciones, empujado por la fuerte corriente de esta enorme y multifacética ciudad. Pero no existe la banda sonora ni la película que haga justicia a la diversidad y a la fuerza que generan las impresiones visuales y musicales de esta ciudad
No comments:
Post a Comment